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Amistad es un afecto personal, recíproco y desinteresado que se da entre dos personas, que nace, se comparte y fortalece con el vínculo. Amistad implica confianza, empatía, respeto, sinceridad, aliento, compromiso, lealtad, honradez, amor, valores todos inherentes al ser humano.

El significado etimológico de la palabra se relaciona con dos orígenes probables. Del latín amicus, derivado de amore o “amar”. Y del griego compuesto por dos vocablos: -“a” que se traduce como “sin” y ego que es el yo. Por lo que el concepto amigo es traducido “sin mi yo“. Amigo es un amor sin egoísmo, despojado de todo interés personal.

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La amistad es una relación interpersonal afectiva, muy común en toda convivencia social, que nace por afinidad de intereses, sentimientos e inquietudes comunes. Según la etapa de la vida en la que se inicie, tendrá distintos grados de trascendencia e importancia.

Pero no sólo las afinidades provocan buenas amistades, ya que la amistad puede darse en gran diversidad de contextos y situaciones, sea en la escuela, el trabajo, una fiesta, la universidad, el bar que frecuentamos, las redes sociales, reuniones o a través de otras amistades.

Las amistades abarcan un universo de distintos tipos de compromiso, desde las más estrechas hasta las más íntimas; algunas nacen desde el primer minuto compartido, y otras se desarrollan con los años. Algunas se mantienen a la distancia con la misma intensidad y confianza que el primer día, y otras desaparecen ni bien cambia la circunstancia en común, por ejemplo al cambiar de trabajo.

Muchas veces la amistad se da entre personas dispares, con quienes no tenemos ningún tipo de parecido. Una buena amistad se nutre no sólo por el intercambio de opiniones y reciprocidad de sentimientos que enriquecen el vínculo, sino por compartir y estar en los buenos y malos momentos de la vida.

El amigo verdadero está presente en la adversidad, cuando la mayoría da la espalda. En los momentos de ruina económica, de duelo, de pérdidas, de ruptura amorosa, de desconsuelo, o cuando el amigo está atravesando una dura enfermedad. Cuando ya no hay risas, alegrías, salidas y buenos momentos para compartir se pone a prueba la verdadera amistad.

Los que se van en momentos de dolor y crisis son sólo conocidos circunstanciales, pero cuando necesitas un hombro sobre el que llorar, quedan los amigos que hacen honor al término amistad.

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