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Inconsistencia

Inconsistencia es el antónimo de consistencia (marcado por el prefijo in) que significa fuerza y rigidez de alguna situación o de alguna cosa. Por lo que inconsistencia refiere al efecto contrario, a aquello que es vulnerable a lo que pueda alterar su funcionamiento, aquello que no es firme ni sólido.

Cuando hablamos de la resistencia de los materiales, decimos que la inconsistencia de ellos puede dañar una construcción.

Barro

En el área química, inconsistencia es la irregularidad no deseada en el estado de la materia. Si una sustancia en estado líquido no tiene la consistencia adecuada será inútil su aplicación pudiendo impedir el procedimiento de un experimento.

En el campo del derecho, la inconsistencia de las pruebas presentadas en una causa judicial puede determinar la culpabilidad de un imputado cuando está en juego la demostración de su inocencia.

Sencillamente inconsistencia es ausencia de solidez en algún instrumento o material con el que se construye una estructura de cualquier tipo, la cual será débil debido a su inconsistencia.

Utilizado el término como sustantivo, es un vocablo muy relativo ya que depende de las variables que se presentan, del entorno a su alrededor y los criterios que se aplican para calificarlo.

En administración de empresas, la inconsistencia es una problemática de las organizaciones que las conduce a la mediocridad. Una manifestación de inconsistencia es la falta de empatía con los usuarios o clientes (según si se trata de organizaciones públicas o empresas privadas).

La empatía es la actitud por la que nos ponemos en el lugar del otro a quien servimos, siendo una posición de inconsistencia ubicarse por encima del cliente o creerse más importante que él. La consistencia en las organizaciones hace que organicen su funcionamiento en torno al cliente.

La burocracia es una de las características que hacen ineficientes e inconsistentes a las organizaciones, igual que la dificultad para adaptarse a los cambios.

La inercia y lo tradicional son características resistentes, sólidas y consistentes en algunas estructuras organizacionales que se ven amenazadas por los cambios. Los proyectos de cambio para no ser inconsistentes requieren esfuerzo y constancia, además de liderazgos nada pusilánimes.

Otra forma de inconsistencia tiene relación con el éxito, que debe tratarse como provisional, como algo que puede caducar si no es consistente. La soberbia, la arrogancia, la falta de humildad pueden hacer vulnerables e inconsistentes a organizaciones que parecían indestructibles.

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