El modernismo fue un movimiento cultural de renovación de los siglos XIX y XX, que se expresó en el arte y en la literatura a través de la obra de creadores europeos e hispanoamericanos, como el poeta nicaragüense Rubén Darío. El modernismo fue un fenómeno internacional de la cultura que se desarrolló en dos continentes, y se manifestó en múltiples disciplinas creativas.
En el campo del arte el modernismo es una denominación propia de España, que recibió distintos nombres específicos en cada idioma: Modern Style, Art Nouveau o arte nuevo, Liberty, Floreale, Sezession, Jugendstil, entre otros. El modernismo no es sinónimo del término inglés modernism, que refiere a otro tipo de arte.
Por primera vez un movimiento cultural involucró simultáneamente a tantos países del mundo, con vínculos evidentes. En aquel entonces las modas e ideas fluían desde alguna potencia dominante de Europa hacia el resto del mundo.
Esta vez fue a la inversa: los europeos fueron conquistados por el estilo literario de un iberoamericano: Rubén Darío, poeta, periodista y diplomático nicaragüense conocido como “padre del modernismo”, aún cuando tuvo inspiración en los mitos grecolatinos y el medievo europeo.
La tendencia renovadora del modernismo literario surgió en oposición a la literatura tradicional que denotaba fórmulas vacías y sin expresión, consolidando un estilo propio de literatura.
También te puede interesar: Plan Marshall
Reflexionaba con profundidad acerca de la realidad y el deseo de autodeterminación de los pueblos latinoamericanos, como así también acerca de cuestiones existenciales sobre el destino, la vida y la muerte.
Destacado por el cuidado de la sonoridad de la lengua, su sensibilidad hacia otras culturas y un refinamiento exquisito de la expresión, el modernismo literario de Rubén Darío traspasó las fronteras latinoamericanas y fue escuela en Europa.
En el campo estético, la singularidad del modernismo se reflejó en diversidad de disciplinas como poesía, arquitectura, diseño gráfico, dibujo y pintura, escultura, artes de la decoración entre las que puede mencionarse la joyería, el mobiliario, la cerámica, la carpintería, el forjado y la vidriera.
El modernismo, en todas sus expresiones, fue un movimiento de tipo cosmopolita, novedoso, libre, joven y preciosista.
En la arquitectura catalana el mayor representante del modernismo fue Antonio Gaudí, como en Bélgica (que fue un importante centro del modernismo) lo fue el arquitecto Víctor Horta. Sus representaciones, en especial de motivos de la naturaleza, empleaban abundantes líneas asimétricas y curvas.
Características del modernismo
- Es cosmopolita y rechaza la realidad cotidiana evocando tiempos pasados (culturas precolombinas 0 asiáticas) o desarrollándose en lugares lejanos y exóticos. Tanto Martí como Darío fueron grandes viajeros que conocieron diferentes centros de la cultura a la vez que a los grandes intelectuales del momento.
- Se rebela contra la vulgaridad, el mal gusto y la cursilería burguesa. Pero con intereses políticos diferentes: en el caso de Rubén Darío con deseos de regresar a la España Católica Imperial; pero en el caso de José Martí (creador del Partido Revolucionario Cubano), el rechazo es hacia el imperialismo norteamericano y español, buscando la unidad latinoamericana que idealizó Bolívar.
- Hay una ruptura con la tradición de la poesía y la prosa poética, utilizando el verso libre (sin rima ni métrica), modificando el lenguaje e introduciendo galicismos, latinismos y arcaísmos.
Formato para citar
"Modernismo". En: Que Significado. Disponible en: https://quesignificado.com/modernismo/ Consultado: 23 de noviembre de 2024.