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Según la Real Academia Española de Letras, un dogma “es una proposición que se asienta por firme y cierta, como principio innegable”. Del griego dokein “pensamiento, principio, doctrina”, la palabra se usa para señalar una posición o doctrina filosófica.

Dogma puede definirse como un principio o un conjunto de principios establecidos por una autoridad, que dentro de su sistema no puede ponerse en duda, sino que está establecido como una verdad incuestionable.

La Biblia es una doctrina revelada por Dios que fundamenta el cristianismo.

El sentido del significado de la palabra dogma implica que su contenido no se puede argumentar ni comprobar, y que por lo tanto, no es opinable. Es un conocimiento que se tiene por seguro y que es indiscutible.

Un dogma puede formar parte de una determinada ciencia, doctrina o posición filosófica, y sirve como fundamento o principio fundamental de ella.

En sus orígenes, el dogma era un concepto relacionado con normas, ordenanzas públicas o decretos emitidos por una autoridad pública, como así también podía hacer referencia a un precepto moral, político o religioso.

 El postulado de un dogma es valorado por su condición de verídico e irrefutable, frente al cual no hay lugar para ningún tipo de réplica.

En la antigüedad el crecimiento de la iglesia como grupo de presión política y como factor de poder, hizo que la palabra dogma quedara asociada a la idea teológica.

Por ello los filósofos que adherían sin cuestionamientos a las determinaciones eclesiásticas, recibieron la denominación de dogmáticos. Las corrientes filosóficas críticas e inquisitivas recibieron el apelativo de escépticos.

Se distinguía entre los dogmas divinos, eclesiásticos y apostólicos, según que la doctrina hubiera sido enseñada por Cristo, por la iglesia o por los apóstoles.

Siguiendo la tradición cristiana, entendemos actualmente por dogma una verdad que es perteneciente al campo de la fe, que fue revelada por Dios, y que su transmisión fue realizada a través de los apóstoles y de la Escritura.

El objetivo de los dogmas es que la iglesia los proponga al pueblo cristiano para su aceptación por parte de los fieles.

Las revelaciones privadas no constituyen un dogma. La teología católica limita la palabra dogma a las doctrinas definidas por el Papa o por el concilio general.

Para el cristianismo, los dogmas escritos en la Escritura fueron revelados a la humanidad a través de Jesucristo.

Considerando que un dogma es una verdad revelada por Dios, debería ser reconocido como tal. Sin embargo el racionalismo por ejemplo, niega la existencia de la revelación divina, y por ende, de los dogmas religiosos.

Un sistema de creencias está compuesto por dogmas religiosos que establecen las bases de su teología. Por ello los dogmas son conjuntos de creencias que distinguen a una religión de las demás, razón por la cual no están sujetos a cambios ni a consensos.

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