Funciones del lenguaje

Las funciones del lenguaje son los distintos propósitos con los que el ser humano utiliza esta herramienta de la comunicación. Es objeto de estudio de la Lingüística, entre otras disciplinas.

En el proceso comunicativo, una de las funciones del lenguaje predomina sobre las otras. Siempre existe una intención del emisor en la construcción del mensaje emitido.

Estas intenciones establecen relaciones entre emisor y destinatario, llamadas funciones lingüísticas.

¿Para qué sirve el lenguaje?

Todas las personas utilizamos esta herramienta para comunicarnos. Se trata de un sistema estructurado de signos y sonidos que nos permiten compartir información. Su utilidad tiene relación con cumplir diversas funciones según la necesidad de cada sujeto.

Funciones del lenguaje

Son las que configuran un proceso de comunicación, involucrando otras áreas de estudio muy importantes para su análisis. Algunas de ellas son la comunicación, la lingüística, la psicología, entre otras. Según la circunstancia y la razón por la que emitimos un mensaje, utilizamos expresiones que reflejan alguna de las funciones del lenguaje.

Por lo tanto, estas trascienden la acción de transmitir y recibir mensajes escritos u orales. Esto significa que existe otro propósito que va más allá como impartir órdenes, expresar emociones, compartir información, deseos, opiniones.

Para definirlas podemos decir que son los distintos objetivos que persigue el lenguaje a la hora de comunicarse en las relaciones humanas.

Estos propósitos o funciones son:

Apelativa

Es aquella en la que el emisor quiere influir en la conducta del otro, y generar una reacción en el receptor. Muy usada en el lenguaje coloquial, discursos políticos o anuncios publicitarios. Por ejemplo: “no te vayas”; “lleva tu paraguas”; “vota patriotismo”.

Referencial o Informativa

Es la más predominante, ya que da a conocer algún dato de la realidad objetiva o del contexto. Por ejemplo: “la noche está estrellada”; “mañana es domingo”.

Expresiva, sintomática o emotiva

Está centrada en los estados de ánimo y sentimientos del yo emisor. Es decir que expresan algún sentimiento hacia alguien o algo en particular. Por ejemplo: “¡me siento fantástica!”;”¡te extraño!”; ¡qué hermoso día!

Poética o Estética

Se basa en las formas del mensaje, en los estilismos empleados y los recursos literarios para hacer mayor énfasis en lo que se transmite. Muy habitual en las obras literarias, textos poéticos, refranes, rimas y juegos de palabras donde se envuelve y enriquece el mensaje. Por ejemplo: “a caballo regalado no se le miran los dientes”; “no hay mal que por bien no venga”; “ojo por ojo, diente por diente”.

Metalingüística

Se refiere a los propios códigos del lenguaje en el que emisor y receptor se comunican, con el fin de aclarar dudas, esclarecer significados, ofrecer una definición, corrección o sugerencia. Por ejemplo: “¿qué significa extranjero?”; “¿cuándo echar lleva hache”?; “¿qué diferencia hay entre El como pronombre y el como artículo?”

Relacional o Fática

Esta función está centrada en el canal de comunicación, pero sin el objetivo de informar. Su fin es facilitar el contacto social, usando muletillas que confirman que el otro está prestando atención. Por ejemplo: “Por supuesto”; “De acuerdo”; “Claro”; “Naturalmente”.

Estas funciones dependen de la intención comunicativa de los sujetos. Y complementan las propuestas por el lingüista alemán Karl Bhüler quien postuló las funciones: simbólica, expresiva y apelativa.