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Superación

La superación es la capacidad para vencer obstáculos y dificultades, a partir de una cualidad fundamental que es la voluntad y de una característica que es la resiliencia.

Sin decisión y deseo de cambio, la posibilidad de superación es inaccesible.

En el plano personal la superación es entendida como crecimiento, en el sentido de un proceso de cambio que tiende al desarrollo individual de la persona.

La capacidad de superación implica la posibilidad de vencer obstáculos

El deseo de alcanzar una meta es un impulso tan poderoso que pone en movimiento los recursos interiores que cada uno de nosotros tenemos.

En el proceso de superación personal hay cualidades que lo acompañan en forma directa, como la tenacidad, la paciencia, la tolerancia, la iniciativa personal y la capacidad de sacrificio.

Para lograr superar los obstáculos, el ser humano necesita hacer un insight acerca de sus posibilidades, sus límites y sus fortalezas.

Se trata de realizar un análisis del contexto y de las dificultades que se presentan en relación con los propios recursos, aptitudes y habilidades haciendo un balance de costes y beneficios.

Tomar conciencia de sí mismo y de la realidad que lo rodea le permitirá realizar la transformación necesaria de su conducta, para poder modificar su entorno.

La superación en el ser humano se trata de una práctica de vida basada en una cosmovisión, en una ideología formada por convicciones y creencias. Es una perspectiva de la vida que no da lugar al conformismo y a la resignación, sino que existe un motor intrínseco motivador para el cambio.

El proceso de superación se inicia con un conjunto de comportamientos enmarcados en una ética, una perspectiva de sí mismo y del mundo en el que la pereza no tiene espacio.

Implica la salida de la propia zona de confort para establecer hábitos nuevos, corrigiendo los errores del pasado e ingresando en una espiral ascendente de aprendizaje, crecimiento y desarrollo.

En el proceso de transformación que implica la superación, la persona adopta una nueva forma de pensamiento que la posiciona de modo positivo frente a la adversidad.

Los pensamientos son el marco de referencia desde el que afrontamos las circunstancias de la vida. Por ello es tan importante cultivar pensamientos de bien y albergar ideas positivas.

Nuestro sistema de creencias está constituido por todas aquellas ideas que a lo largo de nuestra existencia fuimos adoptando, en base a la experiencia adquirida.

La mayoría de estas creencias y concepciones las incorporamos de manera inconsciente desde la niñez, a través de la formación de las matrices de aprendizaje familiar. Las matrices de aprendizaje son los modelos que aprendimos de nuestro entorno para concebirnos a nosotros mismos, a la realidad y a los demás.

Si los estímulos recibidos en la infancia fueron gratificantes, serán mayores los recursos internos o resiliencia para afrontar las adversidades y resolver los conflictos.

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